sábado, 22 de enero de 2011

¿Por qué murió Jesús?

A las personas solemos calificarlas buenas o malas, según nuestro parecer, pero lo que nunca he oído decir es: Aquella persona es pía o impía. Son palabras tan lejanas al vocabulario normal que algunas tendrán que coger el diccionario para averiguar qué significan. Y, lo malo no es que, dicha palabra, esté excluida de nuestro argot diario, sino que, lo triste, es notar que, tampoco se escucha en los ambientes, religiosos, porque también brilla por su ausencia…

Ya S.Pablo nos profetizó diciendo: También debes saber esto: Que en los postreros días vendrán tiempos peligrosos. Porque habrá hombres amadores de sí mismos, avaros, vanagloriosos, blasfemos, soberbios, desobedientes a los padres, ingratos, IMPÍOS… (2ª Timoteo 3. 1-2) ¡Es la mejor y la más actual radiografía de nuestro mundo!

Hoy se blasfema el nombre de Dios con todo descaro, (¿?) y a la vez se pone en tela de juicio Su amor; y hasta con cierto despotismo dicen: ¿Dónde estaba su amor en el diluvio, y en Sodoma y Gomorra donde murieron miles de personas?

Dios nos contesta en su Palabra diciendo que: no perdonó al mundo viejo, mas guardó a Noé, pregonero de justicia, con otras siete personas, trayendo el diluvio sobre el mundo de malvados; y si condenó por destrucción las ciudades de Sodoma y Gomorra, tornándolas en ceniza, y poniéndolas por ejemplo a los que habían de vivir sin temor y reverencia a Dios. (2ª S.Pedro 2. 5-6) Así que, entre otras muchísimas razones, no perdonó al mundo viejo, para que nosotros, hoy, tengamos temor y reverencia a Dios y para que no vivamos impíamente…

Nuestra impiedad e irreverencia ha llegado a tal punto de orgullo y vanidad que no hacemos caso a la dulce oferta que Dios nos hace a través de su Hijo, diciéndonos: Porque de tal manera amó Dios al mundo, que ha dado a su Hijo unigénito, para que todo aquel que en Él cree, no se pierda, más tenga vida eterna. (S.Juan 3. 16) de modo que pasamos descreída y despectivamente de tan generosa promesa.

Tú eres muy dueño de dirigir tu vida como te plazca, pero has de saber que: La ira de Dios se revela desde el cielo contra toda IMPIEDAD… (Romanos 1. 18) Si así se muestra Dios contra toda impiedad, ¿cómo se manifestará Su justa ira sobre ti si rechazas el perdón que Le costó la muerte de su Hijo? Porque si el justo con dificultad se salva, ¿en dónde aparecerá EL IMPÍO y el pecador? (1ª S.Pedro 4. 18)

Ahora es la ocasión de cambiar, si así lo deseas. No será fácil para ti. Te digo más: Te será imposible, y por lo tanto necesitas ayuda, y por supuesto, no la mía, ni la de ninguna religión, etc., porque nada podrían hacer por ti, sólo Cristo puede y a la vez quiere, si tú le dejas: Porque la Gracia de Dios (Cristo) se ha manifestado para salvación a todas las personas, enseñándonos que, renunciando a la IMPIEDAD y a los deseos mundanos, vivamos en este siglo sobria, justa y PIADOSAMENTE. (Tito 2, 11-12)

No quiero terminar sin antes decirte que la única válvula de escape que te queda es si AHORA  aceptas a Cristo como Salvador, porque Él, cuando aún éramos débiles, a su tiempo murió por los IMPÍOS. Pero Dios muestra su amor para con nosotros, en que siendo aún pecadores, Cristo murió por nosotros. (Romanos 5. 6 y 8)

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