La persona que se arrepiente de sus pecados y le pide a Dios perdón por medio de Jesucristo y le dice: sálvame, es en ese momento cuando se es cristiana de verdad. Y su vida habrá dado un giro de ciento ochenta grados porque dejó de ser la misma. A esto el Señor le llama: Nacer de nuevo; y es tan necesario y vital dicho cambio, que Cristo aseguró diciendo.: De cierto, de cierto te digo, que el que no nace de nuevo, no puede ver el reino de Dios. (S.Juan 3. 3)
Espero que estarás de acuerdo conmigo, que a todos nos encanta llamarnos cristianos, pero estamos muy lejos de serlo. Porque no es suficiente haber nacido en un país o en una familia cristiana, o de participar de algunos Cultos o ritos… Si quieres puedes llamarte católico, protestante, musulmán, o un religioso, pero eso no es ser cristiano.
Cuando a los primeros creyentes le llamaron cristianos, era como una mancha, y eso significaba, ser encarcelado, perseguido, y sacrificado y muerto por las fieras del circo…
En la palabra de Dios encontramos el origen de tal apodo. Fue al principio del ministerio de S.Pablo en Antioquia. Junto con Bernabé: …se congregaron allí todo un año con la iglesia, y enseñaron a mucha gente; y a los discípulos se les llamó cristianos por primera vez. (Hechos 11. 26) Mote con el cual trataban de humillarlos. Las Escrituras nos advierten y dicen: Si sois vituperados, por el nombre de Cristo, sois bienaventurados… Así que ninguno de vosotros padezca como homicida o ladrón, o malhechos, o por entremeterse en lo ajeno; pero si alguno padece com cristiano, no se avergüence, sino glorifique a Dios por ello. (1ª S.Pedro 4. 14 –16). Entonces el ser denunciado como cristiano, costaba caro.
De modo que el apelativo les vino por varias razones, pero sobre todo por creer en Cristo como su Salvador personal y porque en sus bocas, siempre estaba ese bendito nombre. Ellos sabían que eran salvos por la muerte de Cristo, y no por sus buenas obras. Además, tenían una relación íntima con Cristo, a pesar que Él estaba en el cielo. De modo que hablaban de Cristo como una realidad, no como una religión. Además, estaban seguros que al morir estarían con Cristo, como lo asegura San Juan en su primera epístola: Estas cosas os he escrito a vosotros que creéis en el nombre del Hijo de Dios, para que sepáis que tenéis vida eterna. (1ª S.Juan 5. 13)
En fin, para esos primeros creyentes, Cristo era TODO, como debe ser para todo verdadero cristiano. Hablaban tanto de Cristo, de su fe en Cristo, de su amor a Cristo, de su seguridad de Salvación en Cristo, de su felicidad en Cristo, de la segunda venida de Cristo por su iglesia, etc., que le pusieron el sobrenombre de CRISTIANOS.
Hoy los llamados cristianos, ¿podríamos asegurar que creen y hablan de Cristo como aquellos antiguos creyentes? , me temo que no. Y si es así: Entonces se llaman cristianos pero no lo son, porque una cosa es llamarse cristiano y otra muy diferente es ser cristianos de verdad.
Quizás tendrás que leer y releer este artículo, porque todo lo dicho hasta aquí te pueda sonar a chino.
Te pregunto: amado lector: ¿Tú tienes la certeza de todas estas cosas? Si no fuera así, te digo: ¿A qué esperas? ¡No te conformes ni te confíes en llamarte cristiano! Tú sabes que Cristo Jesús vino al mundo para salvar a los pecadores… (1 Timoteo 1. 15), a los pecadores que se arrepienten…
No hay comentarios:
Publicar un comentario